martes, 5 de noviembre de 2013

Fecundación in vitro (FIV) y cardiología

Desde 1980, cuando nació el primer bebe probeta, comenzaron una serie de controversias acerca de los efectos que podía tener en el bebé que la fecundación fuera artificial. Sin embargo, solo ahora, después de 30 años y de los avances en diagnostico ecografico, se ha podido documentar lo que es un verdadero riesgo para los niños concebidos por FIV (Fertilización in Vitro, por sus siglas en español), sea cual sea la técnica utilizada. Se había observado que los bebés por FIV tenían la tensión mas alta que los bebés nacidos por métodos naturales, por lo que se tomaron 100 bebés de FIV y se siguieron en su desarrollo fetal y se compararon con 100 bebés concebidos de forma normal. El resultado es que 1 de cada dos bebés de FIV tenían cambios en su corazón o sistema circulatorio, durante la gestación y que persisten durante la vida post-parto. Esto es un porcentaje altísimo de riesgo cardiovascular, un 50%, 1 de cada 2!!. La población normal solo tiene el 5% de riesgo: 5 de cada 100 niños, una diferencia abismal. (Según: Circulation. 2013; published online before print August 28 2013, Assisted Reproductive Technologies are Associated with Cardiovascular Remodeling in Utero that Persists Postnatally). ¿Qué defectos presentaban los bebés concebidos por FIV? El corazón era más grueso: las paredes más gruesas que las de los corazones normales. Sin saberse por qué, estos bebés engrosan sus paredes cardiacas, como si tuvieran un extra de trabajo, porque lo que aumenta es el músculo cardiaco. ¿Para qué aumentan los músculos el corazón? Porque tiene que hacer mas fuerza, como los fisiculturistas. Resulta que estos bebés aumentan la tensión cardiaca porque deben hacer mas fuerza para cerrar el ciclo de diástole –sístole, el ritmo normal de bombeo cardiaco. Es como si les costara arrancar y entonces el corazón debe hacer un mayor esfuerzo de lo normal, de allí este engrosamiento muscular. Pero no sabemos por qué tiene que hacer más esfuerzos un corazón de bebé de FIV que el de un bebé concebido de forma natural. Estos cambios persisten después del nacimiento, tampoco sabemos por qué. Estos cambios también incluían un engrosamiento de las paredes de la aorta cardiaca, la arteria mayor del cuerpo. Las parejas que recurren a FIV, el 50%, el que tiene los problemas de fertilidad es el padre. Es decir, que si uno de cada dos niños nace con problemas cardiacos, con toda probabilidad es debido a que es el padre el que tiene los problemas de fertilidad. La coincidencia es también muy fuerte y fuera de toda duda estadística, pero... ¿por qué? Nuestra ciencia no tiene ninguna explicación. ¿Por qué el corazón? ¿Por qué no otro órgano? Alimentos con Omega 3¿Qué tiene que ver con el corazón, que sea el padre al que le falte la fertilidad?. ¿Qué puede hacerse para prevenir o tratar estos efectos cardiacos?. Los investigadores proponen que una dieta basada en ácidos grasos insaturados sea una posible solución para reducir la tensión cardiaca, pero aun no se sabe si es una dieta que deben seguir los padres o el bebé, o antes del nacimiento, o incluso, antes de la fecundación. Estos ácidos grasos insaturados, son los que combaten el colesterol, hacen que la sangre sea menos viscosa, mas fluida. Los alimentos más ricos en estos ácidos son el aceite de Girasol y después de este, leche rica en omega 3, aceite de hígado de bacalao (la famosa EMULSIÓN DE SCOTT), frutos secos como nueces y almendras, entre otros. Más: http://www.saludterapia.com/articulos/generales/a/1892-fecundacion-in-vitro-fiv-y-cardiología.html#ixzz2jlQnySqZ Más: http://www.saludterapia.com/articulos/generales/a/1892-fecundacion-in-vitro-fiv-y-cardiología.html#ixzz2jlQiih00 Más: http://www.saludterapia.com/articulos/generales/a/1892-fecundacion-in-vitro-fiv-y-cardiología.html#ixzz2jlQePBXw